Prometí escribir y aquí estoy, buscando palabras que den forma a alguna idea o más bien, buscando esa chispa que prenda una hoguera de palabras con sentido. El verano ha llegado, pero no huele a sal, ni tampoco a cloro. Ha perdido la magia de los reencuentros de la infancia, de las noches eternas, y la música de alguna verbena. El hastío y los años nos han ganado esta primera batalla. Hemos pasado de embarcarnos en los primeros rayos de sol, a esperar a disfrutar los últimos, cuando el ímpetu de la juventud vuelve a la rutina, y el camino se despeja para los paseos calmados.
Hemos pasado de querer comernos el mundo como si no hubiese un mañana, a saborearlo despacio, sin prisa valorando el presente porque sabemos que el futuro es incierto.
Ves, esta vez no lo he borrado... Promesa cumplida, aunque sea a medias...
Promesa cumplida!! Sigo leyendo lo que escribes y me sigue pareciendo que me lees la mente... El verano olerá a sal eso no lo dudes aquí, allá... te podrás dar un mini chapuzón en el mar, y espero estar contigo a tu lado ...
ResponderEliminarHiciste muy bien en no borrarlo!
Un besazo de tu amiga y fiel admiradora!