22.2.12

Curvas

Pienso mientras conduzco si este viaje ha habrá llegado a su final o, si por el contrario, sólo es un final de etapa.  Antes de que el mes se acabe, saldrá la nueva convocatoria y no puedo dejar de preguntarme, otra vez, como en los últimos años, si serías capaz de descubrir bajo qué seudónimo me escondo.
Participar es una excusa para volver a ti, a tus manos. Es la licencia que me permito para soñar despierta, para jugar con las metáforas como si fueran las caricias que nunca te daré, que nunca me darás…Debería alejarme, asumir que ha llegado el final de esta etapa, y levantar el vuelo. Pero Arzuaga siempre me recuerda a ti, y tus palabras son las líneas discontinuas de los kilómetros recorridos, en esta carretera llena de curvas…

16.2.12

Divagando...

Dicen que quien tiene un amigo tiene un tesoro, que un amigo es como la sangre, que acude a la herida sin ser llamado. y sin embargo, sólo hace falta oír una conversación para darnos cuenta de del mal uso de la palabra amigo. A menudo suena hueca, carece de significado, vive de rentas antiguas, si es que alguna vez las tuvo…
El tiempo nos acaba, tarde o temprano, colocando frente a la realidad. Los caminos que no se transitan acaban llenándose de hierba, y los utilizados, no siempre son todoterrenos, y uno debe diferenciar quién vale para qué.   Bajo esas cuatro palabras se esconde la riqueza de las relaciones personales por un lado, y por el otro, alguna que otra decepción.  Porque al igual que tenemos que asumir que todos no servimos para todo, uno también debe aceptar  el desequilibrio de la balanza entre el dar y el recibir…
Lo amigos son la familia que se escoge, los que nos demuestran que tenemos un hueco permanente en su vida, aunque no hagamos uso de él, los que te buscan y siempre te encuentran con los brazos abiertos (y viceversa)...
 

7.2.12

Caminos borrados (II)

Nunca pensé que aquellos nueve dígitos que el azar y la insistencia de mi “ángel de la guarda” trajeron a mi vida, podrían reavivar, tantos recuerdos. Hablar con Ella fue, desempolvar momentos olvidados, repasar personas y anécdotas… No reconocer ni siquiera su voz fue un jarro de agua fría inesperado. Ver cómo el destino nos ha llevado y traído de un lado a otro, cruzándonos sin saberlo, ha hecho que me haga preguntas sobre aquella época que, quizá, ha estado invernando, demasiado tiempo…

Fue muy emotivo tener por primera vez fotos de hace veinticinco años, confuso no saber quién es quien, ni qué ha sido de ellos…

4.2.12

Las tres palabras más extrañas

Cuando pronuncio la palabra Futuro,
la primera sílaba pertenece ya al pasado.

Cuando pronuncio la palabra Silencio,
lo destruyo.

Cuando pronuncio la palabra Nada,
creo algo que no cabe en ninguna no-existencia.
Wislawa Szymborska