19.10.07

Vieja estrella

¡Ay, hijo! ¡Cómo han cambiado los tiempos! ¡Lástima que mis piernas torpes no hayan sido capaces de permitirme seguir ese ritmo de vida! Ya ves. Ahora veo el transcurrir de los días desde taburete de madera, con la sensación de cuando era niña y estaba subida al carrusel. Todo gira demasiado deprisa para mis lentos movimientos. Es imposible atrapar el tiempo,.. la vida se nos escapa de las manos sin darnos cuenta. Cuando la presbicia nublo mi vista, aprendí a mirar el horizonte, a disfrutar de esa línea que se pierde en el infinito,.. Ahora no hay noche que al acostarme no me pregunte, si existirá un nuevo amanecer para mi. No puedo dejar de pensar en todas esas pequeñas cosas que he ido aprendiendo en el camino. Ésas, que tu ahora eres incapaz de ver porque tu juventud es un caballo desbocado dispuesto a comerse el mundo a bocados. Y en cierto modo, me das envidia. Yo también fui así, antes de que el caminar se volviese lento y la mirada inquieta se tornase más serena… ¡Cuantas veces tropecé y caí antes de encontrar mi estrella! ¡Ay, mi vieja estrella! Ella también camina serpenteando horizontes, por el crepúsculo de la vida…

8 comentarios:

  1. Lo que cambian no son los tiempos, somos nosotros mismos. Pero claro, opino que cada edad tiene su mérito y eñl nuestro está en saber encontrarlo y disfrutr de el.
    Cuando jovenes nos queremos comer el mundo porque pensamos que somos eternos...

    Besos

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  2. El pueblo de mi padre dice que cuando nacieron el sol y su hermana la luna, su madre murió. El sol ofreció a la tierra el cuerpo de su madre, del cual surgió la vida y de su pecho extrajo las estrellas, y las lanzó hacia el cielo nocturno en memoria de su espiritu.

    Dicho del pueblo Mohicano.

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  3. Qué triste es la vejez, me gustaría no verlo así pero no puedo evitarlo...

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  4. La vida, que no el tiempo, es la que corre demasiado, sin apenas permitirnos aprender demasiado

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  5. ¿Dónde ha pasado el pasado?

    Un día se fueron.

    Y nos encontramos solos, perdidos, como una chaqueta vieja: la nada del vacío.

    Nunca más supimos de ellos.

    Y ya, sus vidas, no fueron más que una habitación vacía a la que no volvimos a llamar.

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  6. Inexorable su caminar con sus pasitos de minuto...

    Un beso, Ideas

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  7. un cambiar
    viejas, estrellas... tengo una muy vieja...

    abrazo europeo

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  8. El tiempo nos da la perspectiva de muchas cosas...sin duda!

    Bikos mil.

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