A la hora de hacer balance, en el crepúsculo de la vida, me asaltaban los pensamientos y los interrogantes. ¿Por qué tuvimos que emigrar?
Y si fuera encontramos una vida mejor, ¿por qué en nuestro fuero interno nos martilleó siempre la pena de haber abandonado nuestra tierra?
¿Si pudieses rebobinar, volverías a grabar la misma película?
Libro: Memoria de un montañés. José Satué Buisán.
Tal vez porque para poder encontrarnos, estaba escrito que primero deberíamos perdernos...
ResponderEliminarEl destino, sus secretos y bemoles. Maravillosa reflexión-
Un abrazo a tu alma