“il y a trop de clics qui se perdent: ayez le bon XXX ” dice el eslogan que aparece en la pantalla. Hay demasiadas cosas que se pierden en la vida, que arrinconamos sin una buena razón que lo justifique. A veces son miedos o vergüenzas, otras indiferencias. “ningún lugar está lejos” me recuerda que nada es imposible para el que verdaderamente desea algo. Recuerdo silencios que debieron ser gritos, pasos en los que retrocedí en lugar de avanzar. ¡Cuántas veces reemplazamos la espontaneidad por lo que se espera de nosotros! ¡Cuántas veces anteponemos cosas banales sobre lo que realmente es importante para nosotros!
Demasiadas fuerzas se pierden recorriendo caminos que no nos llevan a ninguna parte. Listas de objetivos que inauguramos cada comienzo de curso o cada principio de año, y que se quedan en agua de borrajas.
¡Cuántas veces escribimos cartas que nunca enviamos! ¡Cuántas veces necesitamos abrazos que no pedimos! ¡Cuántas veces no pedimos perdón a pesar de que sabemos que nos hemos equivocado! ¡Cuántas veces nos hemos tragado “te quiero” que no hemos pronunciado! ¡Cuántas veces caminamos en zigzag, por miedo a coger el camino directo!
Hay demasiados sueños, deseos y sentimientos que se pierden en el mundo… pero nada está lejos si realmente se desea…
No dejaré que termines de leer esto, sin decirte que te aprecio, que te tengo cariño, que te quiero.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario