Muchos no saben cuál es mi nombre, ni dónde vivo, ni a qué me dedico; y sin embargo, la gran mayoría de la gente que me conoce, respondería sin titubear de dónde procedo, de dónde soy. Y eso me enorgullece, porque adoro esa tierra, mi tierra.
Hace años que empecé mi destierro, que emprendí mi camino hacia aquel lugar donde el corazón me lleve y las circunstancias lo apoyen; y sin embargo, si hay un lugar donde regresar, siempre será allí donde procedo.
No es sólo el nombre que rellena en mi carné de identidad el “nacido en”, es algo más. Es el origen de mi existencia, la tierra me dio cobijo y alimento cuando era una niña, el camino donde di mis primeros pasos y aprendí lo que soy en esencia.
Mi infancia son recuerdos de un pueblo,
donde el río baña las tierras rojas;
mi juventud, veinte años fuera de esta tierra,
mi historia, un largo camino por andar
Sé que te llamas M. Encabo, "Ideas" para todos los que te conocemos de esta forma inmaterial; no se dónde vives ni a qué te dedicas, pero efectivamente sé de dónde eres. De ese pueblecito soriano de tierras rojas bañado por un río; de ese pueblecito que tanto amas y que has logrado que todos los que te leemos lleguemos a querer. En algunas de las imágenes que he logrado ver en tus páginas he podido sentir la ternura que tu transmites con tus palabras, he visto los paisajes que tan bien pintas sin pinceles.Un abrazo
ResponderEliminarUn abrazo para tí y para esa tierra en la que pasé un montón de veranos de mi infancia y adolescencia y a la que quiero como una segunda tierra.
ResponderEliminarUn beso.
ResponderEliminarEl lugar donde uno nació es muy querido. La vida nos hace ir por diferentes caminos, y uno aprende a querer los rincones que lo hacen sentirse bien. Un abrazo solidario.
ResponderEliminarDe "Camino Soria", una canción de Gabinete Caligari...
ResponderEliminarNo hablo por mi que lo cuento todo; pero sí por los amigos que leo. Por mucho que quieran preservar su intimidad siempre algo se escapa entre sus letras, pues se escribe con el corazón y éste a veces rebosa de amor por donde nacimos o donde vivimos o lo que somos o lo que deseamos. Y siempre se escapa algo del amor de cada uno, como el tuyo por tu tierra.
ResponderEliminarUn abrazo
Las raíces de cada uno se llevan en el corazón, no importa donde se esté en ese momento.
ResponderEliminarPor mucho que queramos preservar nuestro trocito de intimidad, nuestras letras poco a poco nos van delatando.
Besos