Apenas si me quedan cuatro cosas por recoger y apagar el portátil. Después desandaré mis pasos, recorreré con la mirada la oficina que durante los últimos meses ha sido testigo de mis idas y vueltas, y de alguna manera se bajará el telón de este tiempo. Se cerrará la puerta de estos días mágicos en los que sentí que todo era posible, y la vida resurgía entre los poros de la piel. Mi amigo Juan no ha parado de decirme en estos meses, que parecía otro, que tenía brillo en la mirada y un entusiasmo especial.
En las últimas semanas, no he dejado de pensar en Ana, en aquella chavalita risueña que me acompañaba en las tardes de verano. Hace unos días nos encontramos por casualidad. Aquella conversación que comenzó hablando de los viejos tiempos acabó derivando en el sentido que le damos a nuestra vida. Siempre le gustó ese tipo de conversaciones, esos diálogos reflexivos, esos viajes al interior de uno mismo. Hablamos de las dobles vidas, de esas personas que tienen amantes, o juegan a seducir lo "prohibido". Debatíamos sobre la fecha de caducidad de los sentimientos, y las diferentes formas de afrontar la situación. Para ella, la ilusión es el motor de la vida,.. Pero no debemos olvidar que son como pompas de jabón. Perseguirlas forma parte de un ritual pero cuando las alcanzamos y las acariciamos, la magia se rompe… Desde entonces no he podido dejar de pensar que tal vez, la única forma de que ese brillo no se apague, es dejándolas marchar…
Javier
Todo pasa, nada permanece, la magia desaparece, las pompas se rompen, sin embargo, él siempre tendrá nuevas pompas que perseguir, nuevas prohibiciones que seducir, nuevas razones para salir de la apatía en que la monotonía de su vida, la ausencia de caricias le tienen sumido desde hace ya mucho tiempo.
ResponderEliminarSí, tal vez haya encontrado una pompa especial, de una textura y color diferente, de su habilidad depende que llegue a conservarla largo tiempo; eso sí, si antes, cansado ya de ese espectáculo, de ese juego, no determina buscar nuevos entretenimientos
Ummm...dejándolas marchar el brillo puede que no se apague, pero sólo permanece en nuestra mente. Vale la pena no dejarla marchar aunque se corra el peligro de que el brillo desaparezca...
ResponderEliminarUn beso.
La magia del amor hace que seamos unos locos capaces de todo..
ResponderEliminarNi te puedes imaginar lo que me ha hecho reflexionar tu última frase: " tal vez, la única forma de que ese brillo no se apague, es dejándolas marchar… "
ResponderEliminarConociéndote, seguro que eres consciente de la profundidad de ese pensamiento.
Besos...y felices vacaciones.... igual vuelvo a pasar(casi seguro) por tus tierras...
besos¡
A veces es la única forma de hacerlas eternas...
ResponderEliminarBikos ml.
Hay muchas maneras de justificar comportamientos, de justificar decisiones.
ResponderEliminarEs muy bonito comparar una amor, una ilusión con una pompa de jabón que al igual de hermosa, es frágil y perecedera, pero llevar esa comparación a premisa de nuestra vida nos hace evadirnos de la realidad para vivir solamente con la mente, perdiendonos todo lo que nos puede ofrecer el conseguir que esa ilusión se materialice.
Y al final la razón de no intentar coger "esa pompa" es la misma, el miedo y la inseguridad....pero esa "pompa" está en nuestra imaginación.
Vale la pena intentar retener ...aunque sólo sea por un tiempo esa pompa que hemosa perseguido.
ResponderEliminarsaludos
Pero sería muy triste, un asco, una vida sin pompas de jabón, sin nada efímero.
ResponderEliminarBello y sensible texto.
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Saludos.
Pero eso cuesta, no es fácil y por otro lado vivir sin ilusiones, pioenso, que es menos vivir...
ResponderEliminarBesos
Afortunadamente, las ilusiones se regeneran. Apenas una pompa de ilusión se ha diluído, una nueva reaparece con colores llamativos y atrayentes. De otro modo...
ResponderEliminarUn abrazo, ideas