19.10.10

Te cuento (d-17)

Admito que estoy cansado, hambriento de momentos en los que realmente me sienta lleno, instantes de esos en los que todo lo de alrededor desaparezca y sienta que vivo en las nubes, que puedo tocar el cielo con las puntas de mis dedos mientras me olvido de mi, de mis circunstancias y hasta de mi nombre.


Acepto el día a día como llega, y lo exprimo hasta la última gota,.. pero no puedo evitar levantarme alguna mañana y ver la sombra de la apatía acechándome. Ya se que la felicidad son instantes de tiempo, que nadie es feliz veinticuatro horas al día, pero añoro aquellos días en los que el tiempo se pasaba volando en su compañía, en los que una mirada suya era el mayor tesoro y su sonrisa el arcoiris tras la tormenta.
Admito que estoy cansado, que hay días en los que mas que caminar, arrastro los pies y voy dejando jirones de piel a cada paso,.. Desgraciadamente, aún no está a la venta en las farmacias, el colirio de la ilusión y el entusiasmo
Javier

9 comentarios:

  1. Ese colirio hay que fabricarlo, es fácil, la ilusión tiene que trabajarla uno mismo... Y es que sin uno, no se puede vivir, sin otros si.
    Besos

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  2. Estoy con Ojos de fuego, nosotros mismos tenemos que buscar la fórmula de ser felices, de encontrar esos instantes.
    Levanta el vuelo y los ánimos.

    Abrazos.

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  3. Pero oye, podrían inventarlo...cuando sea rica mandaré el proyecto a alguien y lo financiaré ;)

    Un besazo.

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  4. Yo no creo que la felicidad se de sólo en momentos, puesto que yo me considero absolutamente feliz, para mí la felicidad es más un estado de tranquilidad, paz y satisfacción con tu vida y con uno mismo. Sentirse simplemente bien, todo el tiempo, aún cuando se está mal.

    Sólo que muchas veces se confunde la felicidad con esos estados de extasis y felicidad extrema, y eso, por supuesto, sólo se da a ratitos.

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  5. Anónimo9/8/07 12:51

    ¿Y Soledad se siente igual que Javier?. ¿Qué fué de su ilusión?. Si al final seguro que uno por otro........ y eso que ella si que tiene consejera.

    Y voy a recordar a Javier que la ilusión y el entusiasmo lo había encontrado, pero no se ha atrevido a cogerlo y a alimentarlo.

    ¿Será demasiado tarde o está esperando una señal?. Mal le va a ir como siga poniendo toda la fe en el destino.......

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  6. Pero ese instante, soy feliz y ese vale por las veinticuatro horas, yo si se que no volere a ver su mirada pero casi siempre hay algun sucedaneo, aunque, a que mentirse...

    Se que simplemente con alguno de esos sucedaneos por momentos la felicidad es real pero ni de lejos parecida a aquella que en este caso (el mio) nunca volvera a ser.

    Pero yo..... sigo.

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  7. Un colirio de este tipo me haría mucha falta.

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  8. Exprimir hasta la última gota del día, es caminar por el camino acertado

    :)

    Un beso!

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  9. Pobre hombre gris este Javier!.
    Se engaña a sí mismo si cree que son suficientes unos pocos momentos para llenar los cráteres de vacío que le embargan.
    Sí, acaso termine por convencerse de que, mientras duró, fueron unos bonitos instantes de vida, y, me pregunto si su cobardía ¿le seguirá manteniendo en esa bola de cristal, en ese mundo de imágenes y estímulos visuales que conforman su "acomodo"?.


    Un abrazo

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